Él es el magnate japonés que apostó millones de dólares por Steve Jobs y el iPhone, incluso antes de crearlo
Bajo el silencio de un jardín japonés en California, Estados Unidos, Steve Jobs se reunió con Masayoshi Son, fundador y CEO del conglomerado SoftBank, quien apostó 17.000 millones de dólares por un dispositivo que aún no existía: el iPhone. Lo hizo sin haber visto un prototipo, sin contrato firmado y solo con la palabra como garantía.