En siete meses, 50 vidas fueron apagadas por los feminicidios en Bolivia


Aida Cruz Charca, una joven de 25 años, murió la madrugada del 1 de agosto luego de luchar durante doce días por su vida en la unidad de terapia intensiva del hospital Viedma, en Cochabamba. Su cuerpo tenía quemaduras en el 70%, producto de un ataque perpetrado, presuntamente, por su cuñado.En Santa Cruz, otra mujer lucha por sobrevivir tras ser víctima de un ataque similar. Su pareja le prendió fuego mientras dormía, la madrugada del pasado sábado. Madre de tres hijos, presenta quemaduras en el 40% del cuerpo y permanece internada en el hospital Japonés en estado crítico.
Estos hechos evidencian el nivel de violencia extrema que enfrentan las mujeres en el país, según advierte el Observatorio de Justicia de la Fundación Voces Libres, que brinda apoyo legal a las familias de las víctimas. Según datos oficiales, entre enero y el 1 de agosto se han registrado 50 feminicidios en Bolivia.
La fundación observa con preocupación el aumento en la crueldad con la que se cometen estos crímenes. En el caso de Aida, el ataque ocurrió el 19 de julio en la zona de Catachilla, en Sacaba, aparentemente tras una discusión por un celular. Era un día de celebración, pero se convirtió en tragedia. El cuñado salió del lugar donde consumían bebidas alcohólicas, regresó con un bidón de gasolina, la roció y le prendió fuego. El esposo de Aida relató que se encontraba en la cocina cuando percibió un fuerte olor a quemado. Al ingresar a la habitación, encontró a su esposa envuelta en llamas. Intentó apagar el fuego con una frazada y luego la trasladó al hospital Solomon Klein. Debido a la gravedad de las lesiones, fue derivada al hospital Viedma, donde finalmente perdió la vida. Según los datos oficiales, de los 50 feminicidios registrados hasta el 1 de agosto, 20 ocurrieron en La Paz, 14 en Santa Cruz, ocho en Cochabamba, cuatro en Oruro, do en Potosí, uno en Chuquisaca y uno en Tarija. A estos casos se suman las tentativas de feminicidios, toda vez que hasta junio se registraron 85 denuncias. “Son hechos, donde la vida de las mujeres estuvieron en peligro y no se las arrebataron no por voluntad de los agresores, sino por otros factores. Amerita ver qué está pasando con las denuncias y el sistema de protección”, advierte la directora de la Casa de la Mujer, Ana Paola García.A pesar de que la Ley 348 garantiza una vida libre de violencia, los casos de feminicidio no disminuyen. Las organizaciones exigen mayor presupuesto para las casas de acogida, fortalecimiento de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) y apoyo oportuno a las víctimas de violencia. “Necesitamos un trabajo integral, no solo centrado en dictar una sentencia efectiva cuando ya se ha producido la muerte de una mujer, sino también en brindar atención oportuna cuando ellas atraviesan situaciones de violencia”, afirmó la directora de la Casa de la Mujer. / El Deber
